La delegación de la Generalitat de Cataluña en Bruselas ha invitado hoy al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y al exconsejero de Salud y eurodiputado, Toni Comín, ambos huidos de la Justicia, a la recepción que ha dado al presidente Salvador Illa en la misma delegación en la capital europea. Ni Puigdemont ni Comín acudieron. Sí en cambio el también prófugo exconsejero de Cultura Lluís Puig , miembro del Govern del expresidente Puigdemont en 2017, que se saludó con Illa y mantuvo un breve intercambio de palabras. Ambos se mostraron emocionados.Según fuentes del Ejecutivo consultadas por ABC, el acto ha sido organizado por la Delegación de la Generalitat ante la UE , y al mismo se invitó a la colonia catalana en la capital belga, como se hace habitualmente. No se consideró oportuno quitar de esa lista a personas requeridas por la Justicia. Fuentes del Govern añadieron que a Puigdemont y a Comin se les invitó en su calidad de diputados en el Parlamento de Cataluña. Las mismas fuentes señalaron que en ningún momento se había previsto una reunión con Puigdemont ni con los exconsejeros Comín y Puig.Illa, hace pocos días, aseguró que no descartaba verse con Puigdemont, pero «cuando toque». En respuesta, Puigdemont le reprochó que hubiese viajado a Bruselas y no tuviese previsto reunirse con él, a diferencia de lo que sí ha hecho con los otros expresidentes de la Generaltat, lo que a su juicio es una muestra de su « resistencia política a aplicar la amnistía ». «Aunque ya se ha visto con el resto de expresidentes de la Generalitat, el presidente Illa cree que ahora no toca reunirse conmigo. Hoy y mañana está en Bruselas, a escasos kilómetros de donde vivo desde hace siete años, como consecuencia de la represión que él y su partido apuntalaron de forma entusiasta. Pero considera que no toca que nos reunimos en la delegación del Gobierno ante la UE. Su actitud es todo un discurso, perfectamente comprensible (…) El mensaje está recibido y ya no insistiremos más. No es que no toque, es que no quiere», lamentó Puigdemont.Ayer, terció también el eurodiputado electo de Junts Toni Comín, para quien el presidente de la Generalitat «haciendo ver que ha venido a reconciliar, ha venido a dividir a los catalanes». «Para él el 1 de octubre no existe, el 9N no existe, el presidente Puigdemont hace como si no existiera. Este presidente ha renunciado a representar la mitad de los catalanes. De esta manera sutil ejerce la presidencia de una manera claramente divisiva», apuntó en una entrevista en Catalunya Ràdio.Noticia Relacionada estandar Si Illa trata de recuperar presencia en Europa y presiona con el catalán Àlex Gubern El ‘president’ da por cerrada la etapa de ostracismo de la Generalitat en BruselasDías antes, Illa reiteraba que si fuese por su voluntad, el encuentro ya se hubiese producido. «Mi deseo es que Puigdemont ya estuviera en Cataluña y nos hubiéramos podido reunir», apuntó en un acto del Grupo Godó, expresando, como en otras ocasiones, su disgusto por el hecho de que no se haya podido aplicar la amnistía al expresidente catalán , con quien habló por teléfono el día de su investidura tras la llamada de éste. Posteriormente, en la Ser, Illa señalaba que le tiene respeto «como persona y como dirigente político» pese a tener «posiciones políticas muy alejadas». Illa reclamó en ese misma entrevista, «desde un profundo respeto» al Poder Judicial, «la aplicación ágil y sin dilaciones» de la Ley de Amnistía, esgrimiendo que ha sido refrendada por el Congreso con una mayoría y que es una medida «buena para Cataluña y España». «A partir de ahí, cuando llegue el momento, yo me voy a reunir con el señor Puigdemont, pero cuando toque», clarificó el presidente catalán.La foto de ayer con Puig marcó la última jornada de la visita de dos días de Illa a Bruselas, donde ha intentado visibilizar el regreso de la Generalitat al escenario europeo tras el ostracismo de los años del ‘procés’. La delegación de la Generalitat de Cataluña en Bruselas ha invitado hoy al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y al exconsejero de Salud y eurodiputado, Toni Comín, ambos huidos de la Justicia, a la recepción que ha dado al presidente Salvador Illa en la misma delegación en la capital europea. Ni Puigdemont ni Comín acudieron. Sí en cambio el también prófugo exconsejero de Cultura Lluís Puig , miembro del Govern del expresidente Puigdemont en 2017, que se saludó con Illa y mantuvo un breve intercambio de palabras. Ambos se mostraron emocionados.Según fuentes del Ejecutivo consultadas por ABC, el acto ha sido organizado por la Delegación de la Generalitat ante la UE , y al mismo se invitó a la colonia catalana en la capital belga, como se hace habitualmente. No se consideró oportuno quitar de esa lista a personas requeridas por la Justicia. Fuentes del Govern añadieron que a Puigdemont y a Comin se les invitó en su calidad de diputados en el Parlamento de Cataluña. Las mismas fuentes señalaron que en ningún momento se había previsto una reunión con Puigdemont ni con los exconsejeros Comín y Puig.Illa, hace pocos días, aseguró que no descartaba verse con Puigdemont, pero «cuando toque». En respuesta, Puigdemont le reprochó que hubiese viajado a Bruselas y no tuviese previsto reunirse con él, a diferencia de lo que sí ha hecho con los otros expresidentes de la Generaltat, lo que a su juicio es una muestra de su « resistencia política a aplicar la amnistía ». «Aunque ya se ha visto con el resto de expresidentes de la Generalitat, el presidente Illa cree que ahora no toca reunirse conmigo. Hoy y mañana está en Bruselas, a escasos kilómetros de donde vivo desde hace siete años, como consecuencia de la represión que él y su partido apuntalaron de forma entusiasta. Pero considera que no toca que nos reunimos en la delegación del Gobierno ante la UE. Su actitud es todo un discurso, perfectamente comprensible (…) El mensaje está recibido y ya no insistiremos más. No es que no toque, es que no quiere», lamentó Puigdemont.Ayer, terció también el eurodiputado electo de Junts Toni Comín, para quien el presidente de la Generalitat «haciendo ver que ha venido a reconciliar, ha venido a dividir a los catalanes». «Para él el 1 de octubre no existe, el 9N no existe, el presidente Puigdemont hace como si no existiera. Este presidente ha renunciado a representar la mitad de los catalanes. De esta manera sutil ejerce la presidencia de una manera claramente divisiva», apuntó en una entrevista en Catalunya Ràdio.Noticia Relacionada estandar Si Illa trata de recuperar presencia en Europa y presiona con el catalán Àlex Gubern El ‘president’ da por cerrada la etapa de ostracismo de la Generalitat en BruselasDías antes, Illa reiteraba que si fuese por su voluntad, el encuentro ya se hubiese producido. «Mi deseo es que Puigdemont ya estuviera en Cataluña y nos hubiéramos podido reunir», apuntó en un acto del Grupo Godó, expresando, como en otras ocasiones, su disgusto por el hecho de que no se haya podido aplicar la amnistía al expresidente catalán , con quien habló por teléfono el día de su investidura tras la llamada de éste. Posteriormente, en la Ser, Illa señalaba que le tiene respeto «como persona y como dirigente político» pese a tener «posiciones políticas muy alejadas». Illa reclamó en ese misma entrevista, «desde un profundo respeto» al Poder Judicial, «la aplicación ágil y sin dilaciones» de la Ley de Amnistía, esgrimiendo que ha sido refrendada por el Congreso con una mayoría y que es una medida «buena para Cataluña y España». «A partir de ahí, cuando llegue el momento, yo me voy a reunir con el señor Puigdemont, pero cuando toque», clarificó el presidente catalán.La foto de ayer con Puig marcó la última jornada de la visita de dos días de Illa a Bruselas, donde ha intentado visibilizar el regreso de la Generalitat al escenario europeo tras el ostracismo de los años del ‘procés’.
El expresidente de la Generalitat no acude a la recepción
La delegación de la Generalitat de Cataluña en Bruselas ha invitado hoy al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y al exconsejero de Salud y eurodiputado, Toni Comín, ambos huidos de la Justicia, a la recepción que ha dado al presidente Salvador Illa en la misma delegación en la capital europea. Ni Puigdemont ni Comín acudieron. Sí en cambio el también prófugo exconsejero de Cultura Lluís Puig, miembro del Govern del expresidente Puigdemont en 2017, que se saludó con Illa y mantuvo un breve intercambio de palabras. Ambos se mostraron emocionados.
Según fuentes del Ejecutivo consultadas por ABC, el acto ha sido organizado por la Delegación de la Generalitat ante la UE, y al mismo se invitó a la colonia catalana en la capital belga, como se hace habitualmente. No se consideró oportuno quitar de esa lista a personas requeridas por la Justicia. Fuentes del Govern añadieron que a Puigdemont y a Comin se les invitó en su calidad de diputados en el Parlamento de Cataluña. Las mismas fuentes señalaron que en ningún momento se había previsto una reunión con Puigdemont ni con los exconsejeros Comín y Puig.
Illa, hace pocos días, aseguró que no descartaba verse con Puigdemont, pero «cuando toque». En respuesta, Puigdemont le reprochó que hubiese viajado a Bruselas y no tuviese previsto reunirse con él, a diferencia de lo que sí ha hecho con los otros expresidentes de la Generaltat, lo que a su juicio es una muestra de su «resistencia política a aplicar la amnistía». «Aunque ya se ha visto con el resto de expresidentes de la Generalitat, el presidente Illa cree que ahora no toca reunirse conmigo. Hoy y mañana está en Bruselas, a escasos kilómetros de donde vivo desde hace siete años, como consecuencia de la represión que él y su partido apuntalaron de forma entusiasta. Pero considera que no toca que nos reunimos en la delegación del Gobierno ante la UE. Su actitud es todo un discurso, perfectamente comprensible (…) El mensaje está recibido y ya no insistiremos más. No es que no toque, es que no quiere», lamentó Puigdemont.
Ayer, terció también el eurodiputado electo de Junts Toni Comín, para quien el presidente de la Generalitat «haciendo ver que ha venido a reconciliar, ha venido a dividir a los catalanes». «Para él el 1 de octubre no existe, el 9N no existe, el presidente Puigdemont hace como si no existiera. Este presidente ha renunciado a representar la mitad de los catalanes. De esta manera sutil ejerce la presidencia de una manera claramente divisiva», apuntó en una entrevista en Catalunya Ràdio.
Días antes, Illa reiteraba que si fuese por su voluntad, el encuentro ya se hubiese producido. «Mi deseo es que Puigdemont ya estuviera en Cataluña y nos hubiéramos podido reunir», apuntó en un acto del Grupo Godó, expresando, como en otras ocasiones, su disgusto por el hecho de que no se haya podido aplicar la amnistía al expresidente catalán, con quien habló por teléfono el día de su investidura tras la llamada de éste. Posteriormente, en la Ser, Illa señalaba que le tiene respeto «como persona y como dirigente político» pese a tener «posiciones políticas muy alejadas». Illa reclamó en ese misma entrevista, «desde un profundo respeto» al Poder Judicial, «la aplicación ágil y sin dilaciones» de la Ley de Amnistía, esgrimiendo que ha sido refrendada por el Congreso con una mayoría y que es una medida «buena para Cataluña y España». «A partir de ahí, cuando llegue el momento, yo me voy a reunir con el señor Puigdemont, pero cuando toque», clarificó el presidente catalán.
La foto de ayer con Puig marcó la última jornada de la visita de dos días de Illa a Bruselas, donde ha intentado visibilizar el regreso de la Generalitat al escenario europeo tras el ostracismo de los años del ‘procés’.
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